•Abuela de la víctima denuncia negligencia por parte de maestra y director del plantel.
Por Ofelia Espinoza
Cuautla, Morelos, 08 de mayo de 2025 – Una menor de edad, estudiante de tercer grado de la escuela primaria Narciso Mendoza de Cuautla, resultó con una fractura en el brazo tras ser presuntamente empujada por un compañero que, según denuncia su abuela y tutora, Francisca Ramírez, la ha estado acosando desde el mes de octubre. El incidente ocurrió el pasado 30 de abril durante la celebración del Día del Niño organizada por la institución educativa.
La señora Ramírez relató con angustia que al llegar a la escuela, la maestra del grupo le informó que su nieta había sufrido un accidente y se había lastimado la mano. Sin embargo, la versión de la menor apunta a que, mientras jugaba a la cuerda, el mismo compañero que la ha estado molestando la empujó, provocando su caída y la consecuente fractura en el brazo.
Ante la evidente lesión, la abuela solicitó la intervención de paramédicos, quienes confirmaron la fractura y la urgencia de trasladar a la niña a un hospital para una intervención quirúrgica. La propuesta inicial de la docente de llevarla a un Centro de Salud fue rechazada por la abuela, quien, consciente de la crisis en el sector salud, optó por un hospital privado. Ahí, los especialistas confirmaron la gravedad de la fractura, que involucraba ambos huesos del brazo, y procedieron de inmediato a la cirugía.
Un momento crítico durante la operación fue cuando la niña presentó dificultades respiratorias, lo que llevó a los médicos a considerar la intubación, a lo que la abuela se opuso. Posteriormente, el padre del menor señalado como agresor acudió al hospital, manifestando su pesar por lo sucedido y ofreciendo apoyo. La maestra y la supervisora escolar también estuvieron presentes inicialmente.
Tras el alta de su nieta, la señora Ramírez se enfrentó a una cuenta hospitalaria de 47 mil 500 pesos, la cual, tras negociaciones, se redujo a 40 mil 500 pesos, cantidad que logró reunir y pagar. Al buscar apoyo en la escuela, la respuesta del director, Jesús Pérez, fue que se trató de un accidente y se negó a firmar cualquier documento para solicitar ayuda al Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM). Incluso, según la abuela, el director le advirtió sobre posibles acciones legales en su contra, asegurando que contaría con defensa legal.
Indignada por la falta de apoyo y la presunta negligencia de la escuela, Francisca Ramírez presentó una denuncia penal ante la Fiscalía de la Región Oriente por el acoso que ha sufrido su nieta y por la omisión de la institución educativa en asumir su responsabilidad por los hechos ocurridos dentro de sus instalaciones y durante un evento por ellos convocado. La abuela exige justicia y que se asuman las consecuencias de lo sucedido.